Ayer domingo 17 de mayo, leía  en la Vanguardia el artículo: Adiós corbata, hola «jeans». Trata que los cambios de la sociedad se reflejan en la imagen y los políticos en plena campaña se apuntaban a las tendencias:

Por profesionalidad, interés e investigación estos días, en plena campaña de «Elecciones municipales 2015» intento leer los artículos que llegan a mis manos referentes a imagen y política. Me alegra que se le dé importancia a la imagen y su comunicación, y me molesta cuando no se trata la imagen externa -un código más de la imagen personal y profesional- con profesionalidad.

Sin duda la imagen externa es una herramienta y por suerte, en muchos sectores profesionales ha habido y hay una apertura en cuanto a imagen y comunicación;) Pero esta apertura hay que saberla introducir de forma coherente y ser consciente que todo elemento de la imagen: indumentaria, gestos, voz, etc. individualmente tiene una comunicación y en su conjunto otro. Cada día estamos más obligados a dominar la imagen personal & profesional y su comunicación y esto incluye la imagen externa

Tanto en el ámbito político como empresarial, en algunos sectores la imagen informal ha ido cogiendo terreno, sea por comodidad, proximidad, jovialidad, frescura, etc. Cada persona o empresa es diferente, por eso muchas han apostado para crear un «Dress Code» para evitar errores y reforzar una comunicación alineada a la cultura del partido político o empresa, actividad y persona.

Leyendo -Adiós corbata y hola «*jeans»- he pensado que quizás los políticos y sus gabinetes de comunicación necesitarían un manual genérico de vestir formal, informal y deportivo. Y además hay que tener en cuenta que una forma de vestir, si no encaja con la tipología corporal y facial y su forma de ser no hablará con credibilidad.

Totalmente de acuerdo que cada día más políticos integran los «jeans» en algún momento de sus campañas. El «jeans» es una pieza deporte, y a lo largo de los años se ha ido integrando en los outfits informales. «El jeans» solamente es un pieza más de un estilismo, igual que una corbata o una americana o una camisa…y porque la indumentaria hable con credibilidad, hay que coordinarla con el resto de prendas de ropa y complementos que componen todo un estilismo. Además, tiene que adaptarse a la tipología corporal y manera de ser. Los elementos de la imagen externa tienen que ir alineados con la expresión y saber estar. 

Analizando la foto del reportaje de los cuatro políticos que traen «jeans»: Pedro Sánchez, Mª Dolors de Cospedal, Albert Rivera y Esperanza Aguirre, observamos que su comunicación es incomoda, no consiguen proximidad ni seguridad. Tal como ya hemos comentado, la imagen externa es un elemento más que tiene que ir acorde a la expresión y saber estar. Es imprescindible para transmitir con seguridad, credibilidad y naturalidad en cualquier entorno y situación, seas político o no. Y esto no lo hace ni una corbata, ni unos «jeans»…. lo hace un conjunto de elementos que hay que conocer y adaptar con estilo y coherencia. El estilo es identidad a través de la imagen externa.